Un riad es una casa marroquí tradicional construida en torno a un patio. El centro histórico de las ciudades marroquíes es conocido como la vieja medina y está compuesto exclusivamente por este tipo de viviendas. Una de estas medinas es la medina de Tetuán. Se trata junto a la medina de Fez, de la medina mejor conservada de Marruecos. Al pasearse por sus calles se siente uno transportado a la Edad Media: no hay coches, las calles son todas peatonales pues son demasiado estrechas, los artesanos trabajan en sus pequeñísimos talleres de la misma forma que los hacían hace siglos. Con la modernidad, los marroquíes perdieron el gusto por este tipo de viviendas. Surgió un gran interés por los apartamentos modernos de la ciudad moderna y, poco a poco, estos pequeños palecetes fueron olvidados. Pero recientemente, primero en Marrakech, después en Fez, Asilah y Chauen y finalmente en Tánger, numerosas personas comenzaron a interesarse por este patrimonio arquitectónico. Restauraron estas viviendas para vivir o para establecer casas de huéspedes. Tetuán ha sido la última en ser descubierta, gracias a esto, su medina no está demasiado explotada a diferencia de las de otras ciudades. Es todavía posible encontrar riads con precios muy interesantes.